La UPF , en relación a la grave y preocupante situación por la que en estos momentos atraviesa la Fiscalía Provincial de Madrid y ante la valoración que de dicho problema ha realizado la Asociación de Fiscales  en una comunicación difundida a toda la plantilla, estima que es necesario realizar las siguientes precisiones:

La UPF no está por la labor de alimentar polémicas estériles o indeseables dinámicas de enfrentamiento, únicamente aspiramos a cumplir fielmente con nuestro compromiso electoral asumido en las elecciones al Consejo Fiscal con la plantilla de Madrid: defender sus justas reivindicaciones ante el Consejo o cualesquiera otros órganos de la Fiscalía. Todo lo contrario, y con la legitimidad que nos da el haber sido la lista más votada en Madrid, pretendemos valorar con objetividad el problema existente y buscar soluciones en interés de la propia Fiscalía de Madrid, de los compañeros y, en definitiva, del servicio público de la justicia que demandan los ciudadanos. Se ha procurado abordar el problema de forma crítica y exigente pero con rigor, dejando al margen los intereses estrictamente asociativos.

Por ello, la UPF lamenta que el comunicado de la AF recientemente difundido sobre esta cuestión incluya descalificaciones gratuitas e injustas sobre la organización de la Fiscalía de Madrid con anterioridad al nombramiento del actual Fiscal Jefe que, tal y como han sido formuladas, sólo contribuyen a desenfocar el problema y eludir responsabilidades. Así, la alusión que se realiza en el último comunicado difundido por la asociación de fiscales a “la desorganización en la que se encontraba la fiscalía de Madrid durante los años anteriores” no pretende sino relativizar la actuación del nuevo Fiscal Jefe provincial y justificar un proyecto personal que no cuenta con siquiera un mínimo de consenso entre su plantilla, cuyos integrantes, ahora más si cabe, valoran positivamente la labor desempeñada por el anterior Fiscal Jefe Provincial de Madrid. Es más, parece oportuno recordar que el propio Fiscal General Del Estado, con el voto unánime del Consejo Fiscal, propuso en su favor la Cruz distinguida de Primera clase de La Orden de San Raimundo de Peñafort por su labor al frente de la fiscalía madrileña.

Pero más allá de las desafortunadas alusiones personales, lo que la plantilla de Madrid reclama es reconducir la situación y una búsqueda dialogada de soluciones, y a tal efecto resultan insuficientes los pronunciamientos meramente formales o retóricos. Negar la competencia del Consejo Fiscal para discutir este problema y no ofrecer ningún otro foro supone ahogar la voz de una plantilla unida en su rechazo al sistema proyectado. No puede enquistarse el problema a la espera de soluciones que no se proponen.

Es necesario que se adopten medidas por quien tiene capacidad y responsabilidad para ello. Si se ha estimado que el Consejo Fiscal no es competente para intervenir y revisar la impugnación que se formuló por casi cien fiscales de Madrid, lo que no se podrá cuestionar es la legitimación y competencia del Fiscal General Del Estado para ello.

Atendiendo a las reclamaciones de los compañeros de la Fiscalía de Madrid  la UPF ni ha eludido ni va a eludir sus responsabilidades y realiza un sincero ofrecimiento para colaborar en esa búsqueda dialogada y consensuada de soluciones.

 

 

En Santiago a 5 de mayo de 2014

UNION PROGRESISTA DE FISCALES